La gestión de los residuos en la región de Tarapacá, Chile, una realidad compleja
Visitamos un Punto Limpio de la capital, Iquique, y conocemos al activista Bastián Barria de la ONG Desierto Vestido, que visibiliza la problemática del textil en el desierto de Atacama. Lo hacemos en el marco de una segunda estancia sobre el terreno en este territorio para encarar la recta final del proyecto «Escáner de circularidad de Tarapacá», en el que también hemos celebrado dos talleres con agentes clave del territorio.
«Faltan más puntos de reciclaje, y ya no solo para proteger el medio ambiente y recuperar el valor de los materiales y los recursos que utilizamos, sino por una cuestión de bienestar económico y social.» Lo afirma Denisse Morán, para quien «es necesario invertir en empleo circular, eliminar el estigma de los gestores de residuos y dignificar su rol». Morán es presidenta de la Asociación de Recicladores de Tarapacá (Chile) y del Punto Limpio de la Zona Franca de Iquique (ZOFRI), que es la principal plataforma de servicios para comercializar y facilitar negocios en el Cono Sur de América Latina. Los Puntos Limpios son espacios habilitados para que la ciudadanía lleve sus envases y embalajes, que luego se trasladan a plantas de reciclaje ubicadas en diferentes puntos del país, sobre todo en la Región Metropolitana de Santiago.
Este Punto Limpio en cuestión da servicio a 7.000 familias y, aunque Iquique es la ciudad más grande de la región de Tarapacá con una población de casi 200.000 habitantes, solo hay cuatro como estos repartidos por la ciudad. El testimonio de Morán es uno de los que han recogido Adriana Sanz Mirabal y Aina Planas Carbonell, coordinadoras del proyecto «Escáner de circularidad de Tarapacá», en una nueva visita a Iquique en la que han podido conocer de primera mano la realidad de la gestión de residuos en la región chilena.
En esta visita, Sanz y Planas también se han reunido con el ingeniero y activista Bastián Barria, representante de Desierto Vestido, una organización local reconocida internacionalmente por sus campañas para visibilizar la problemática del textil en el desierto de Atacama, en concreto, en el vertedero ilegal de Alto Hospicio. Una de las que más impacto mediático ha tenido es la Atacama Fashion Week, un desfile de modelos vestidas con residuos textiles remanufacturados y con el vertedero como escenario. Tal como explicó Barria, esta zona es considerada por algunos como una zona de sacrificio, es decir, un área geográfica altamente contaminada o degradada ambientalmente al haberse priorizado las ganancias económicas que proporciona la ZOFRI, que es la vía de entrada de las aproximadamente 59.000 toneladas de textiles que llegan cada año procedentes de Estados Unidos, Europa o Asia.
Para valorizarlas, tiempo atrás se fundó en la región Ecofibra —ahora Procitex—, una empresa que transforma los residuos textiles en paneles de aislamiento térmico y acústico para el sector de la construcción, pero terminó mudándose a Santiago. El motivo, los impuestos de aduanas para mover bienes y residuos desde la región de Tarapacá, que ejercen una barrera importante para potenciales empresas de reciclaje que aspiren a comercializar los residuos valorizados.
El encuentro con Barria también sirvió para conocer de primera mano una organización local dedicada a la formación y sensibilización de diferentes colectivos, especialmente jóvenes, que podrá ser un aliado clave para las líneas de actuación que se definirán en la última fase del proyecto.
Además de poder conocer sobre el terreno la realidad de la región en materia de sostenibilidad, las responsables de proyectos de inèdit realizaron dos talleres con agentes clave del territorio: uno con representantes de las áreas de medio ambiente de los municipios de la región de Tarapacá y otro con agentes del sector de la gestión de los residuos.
Una vez más, el viaje a Iquique ha aportado al equipo de inèdit una perspectiva muy valiosa para el avance del proyecto y para ajustar las líneas estratégicas a la realidad de este territorio.
El proyecto «Escáner de circularidad de Tarapacá» es un encargo de CircularTec, el primer centro tecnológico de América Latina y el Caribe dedicado a impulsar la transición hacia la economía circular, y con el cual inèdit tiene un convenio de colaboración. En estos momentos, se están definiendo las líneas de acción aterrizadas a la realidad de la región, y está previsto que el proyecto finalice a finales del verano o principios del otoño.